Reverencias

En una sociedad como la rokuganí los saludos son una parte muy importante de la etiqueta ritual diaria. Las reverencias llevan un grado implícito de respeto y de enorme carga de lenguaje no verbal que puede hablar tanto o más que las palabras dichas por el samurai en cuestión.

Inclínate siempre ante alguien de tu misma casta social: p.ej., un samurai se inclina ante en otro samurai, un heimin ante otro heimin.

Arrodíllate siempre ante alguien que es de una posición social mayor que la tuya. Los samurai siempre se arrodillan ante sus daimyo, y los heimin ante los samurai. 

Si te inclinas ante alguien de posición superior a la tuya (como tu padre), hazlo siempre más de lo que él se incline ante ti, para mostrarle tus respetos.

Desde los samurai hasta los eta se arrodillan ante el templo de la Diosa del Sol.

Pero antes de llegar a esta reverencia deberemos acercarnos a la persona. Es de mala educación hablar con una persona a una distancia menor de un par de pasos. No hay que dejar 2 metros entre personas pero casi. Al menos si esa persona es desconocida o es alguien que no sea de nuestro círculo íntimo. Cuando hablamos con un amigo, con nuestra pareja, con familiares, podemos estar un poco más cerca.

Cuando estamos ante una persona que es superior a nosotros en la jerarquía entonces esa distancia se hace muy patente. 

En reuniones para con daimyos lo habitual es estar a unos 7 pasos de ellos. Imaginemos la sala de reuniones, el daimyo sobre el estrado y a 7 pasos nosotros. Cuando se trata del Emperador estar a menos de 10 pasos es un tema de seguridad imperial, así que sólo estará en ese espacio personas de su más completa confianza, como si propia guardia personal o por ejemplo, algún progenitor del Hantei o un daimyo de las familias Imperiales. La distancia de 7 a 10 pasos es muy simple, a 10 pasos no llega una espada nunca, a 7 pasos es complicado, pero podría.

Las reverencias de pie siempre se harán: Los hombres con las manos a los laterales del cuerpo y las mujeres recogidas delante de su regazo una sobre la otra.

1.- Inclinación de unos 15grados. Eshaku. Saludo casual a las personas de inferior rango o de mismo rango con el que tengamos.

2.- Inclinación de 30 grados. Keirei. A personas de nuestro mismo rango a las que tenemos respeto, acabamos de conocer o con las que queremos mostrar un rango de educación adecuado.

3.- 45 grados de inclinación. Saikeirei. A un superior, ya sea por gloria, honor, respeto... Podemos reverenciar así a un sensei al que tenemos mucho respeto o al padre de nuestra prometida.

4.- 90 grados de inclinación. Inclinación muy profunda a señores, daimyos y demás personas con posiciones muy importantes y distantes a nuestra posición.

5.- Inclinación en el suelo con la cabeza en este. Inclinación ritual que se guarda para el Emperador y en presencia de altísimos miembros de la sociedad, como daimyos de clanes.

Este tipo de inclinaciones que deja tan a la vista la sumisión son las que, por eso mismo, se usan muchas veces como última súplica, en una demanda a nuestros deseos. (Imaginemos el drama de una madre que suplica la vida de su hijo porque está segura que el crimen que se le imputa no es real y le suplica así a su señor que le perdone la vida).

Hacer una reverencia mayor o menor cuando la circunstancia está clara está obviamente aparejada a una ofensa o burla.

Al Emperador hay que reverenciarle 3 veces con genuflexión hasta tocar el suelo con la frente, a 100 pasos, a 50 pasos y a 10 pasos si tenemos el tremendo honor de ser colocados hasta ese punto.
Sino nos quedaremos sobre los 25 pasos con tal de no ser inapropiados. Los demás señores feudales, dependiendo de si la audiencia es pública, privada, en sus salas de tronos o demás si son señores de Clanes lo adecuado es hacer al menos 2 reverencias, al entrar y al tomar posición en el lugar indicado no poniendo la cabeza en el suelo salvo que la circunstancia lo merezca, vale con una reverencia de 90 al entrar en la sala y otra justa antes de tomar asiento.

Esto también vale para los daimyos de las grandes familias. Los señores feudales más modestos o sólo señores de otros samurais tendrán una reverencia profunda de 90 grados antes de tomar asiento y otra de 45 grados antes de entrar en la sala en símbolo de pedir paso para entrar.